Imaginemos que nos encontramos tumbados en un campo lleno de flores haciendo un ángel mientras la nube de polen se eleva a nuestro alrededor.
Imaginemos un segundo que no nos producirá una reacción alérgica y que, en cambio, nos figuremos que no es más que el polvo de hadas que nos da el billete para viajar en primera clase a través de las nubes donde volamos descalzos acariciando la densa capa blanquecina que nos eleva cada vez más y nos provoca un simpático y agradable cosquilleo a los sentidos.
Imaginemos sólo un poco mas que tras atravesar la inmensa capa de nubes, se descubre ante nosotros un majestuoso castillo custodiado por un dragón rojo de imponentes ojos amarillos. Imaginemos, sólo por el simple hecho de imaginar que dentro del castillo, se encuentra oculto en un viejo y mágico baúl, todos nuestros sueños por cumplir y que la llave para poder liberarlos está en el collar de espinas que corona el cuello del gran dragón...
Son tiempos difíciles para los soñadores, decía Amelie.
Martasky
Jajaja, me ha gustado Marta. Al principio pensé que me estabas hablando de los efectos de la marihuana o algo así xd! Sin duda, un final de esos que me gustan. Biquiños!
ResponderEliminarJajajaja si, la verdad xD Parece. Pero imaginar a veces tambien es una droga y en su justa medida esta bien, pero si nos excedemos, nos olvidamos de vivir. Me alegro que te haya gustado!!
ResponderEliminarUn biquiño y gracias por pasarte!!
jajjajajja.. mandiiiiii que te nos vas!!! jajajjajajj.. la amelie que sabia eh!!??
ResponderEliminarJajajaja, si, un poco se nos va xD
EliminarLa amelie, si, una sabia la tia, mucho aprendí de ella :)
Gracias por pasarte!!
Un besin!
Se parece tanto a la realidad que no me resulta difícil imaginarlo:... un collar de espinas en el cuello del gran dragón...
ResponderEliminarEn los sueños encontramos un mundo enteramente nuestro, que se sumerge en su profundo océano, que sobrevuele la más alta nube... y ... No es bueno dejarse arrastrar por los sueños y olvidarse de vivir... Debemos soñar siempre equilibradamente, es como los mandos de un avión, donde el piloto eres tú. Tú decides cuanto subir y como mantener el rumbo.
EliminarGracias por pasarte!! Un beso!
Pues nada, palos, estacas, escudos y ¡¡¡a por el dragón!!
ResponderEliminarExacto! Maloserá que así no le derrotemos :) Gracias por pasarte!
EliminarEs como si siempre soñáramos a destiempo y en el lugar equivocado...
ResponderEliminarSi, como si los sueños recorriesen distancias a años luz de nuestra realidad y a veces parecen inalcanzables.
EliminarPero no por ello debemos dejar de perseguirlos :)
Gracias por pasarte!
Un saludo!
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